"Cada viaje es un sueño que guardo en el baúl, para no olvidarlo y para encontralo siempre."

14 de septiembre de 2011

Km 9: Alpes. Agosto. Sallent de Gallego- Burgos: 450km




Amanece despejado, la Foratata nos saluda al asomarnos a la venta de la habitación, hoy es nuestro ultimo día y hay que aprovecharlo.

Foratata desde el hotel
Así que sin desayunar ni nada salimos rumbo al Portalet de nuevo, es pronto y aún no hay nadie por las calles, solo el ruido de nuestras monturas que se despiden de Sallent y de España para entrar de nuevo en Francia.

El Portalet es divertido y más aún sin tráfico, una vez abajo ponemos rumbo al Marie Blanc, a mi ese puerto me gusto mucho hace un par de años, pero esta vez no supe apreciarlo, más adelante buscamos el Col d'Ichere y el col de Lie, la carretera es mala y estrecha, más bien parece un camino agrícola asfaltado, los puertos son bajitos y sin mucho que ofrecer ni en conducción ni en paisajes, así que le comento a Belda que lo mejor que podemos hacer es ir a buscar la Pierre de San Martin, un puerto de verdad, que le aseguro va a hacerle disfrutar entre mucho y mucho más; me hace caso.

Así que después de mil curvas y mucho disfrute, entramos en España por ultima vez, yo se que este era el ultimo puerto, aún me queda un puertecito entre Burgui y Navascúes, pero este es "el ultimo grande", se acaban las vacaciones y con ellas las montañas, he estado en los Alpes y he terminado en mis amados Pirineos, he descubierto que los puertos alpinos son grandes y extremadamente bellos, con paisajes alucinantes que te invitan a parar en cada curva, pero también que los pirenaicos, aún siendo más pequeños, estando en muchos casos peor asfaltados también son inmensamente bellos, también tiene paisajes increibles que te hacen disfrutar de la moto y de los colegas.

Con esos pensamiento llegamos a Isaba y paramos a desayunar-almozar-comer lo que sea, un par de pichos de tortilla y una cerveza acompañando a ese ambiente de despedida que se colaba en las conversación, ya no queda nada, salir a la autopista que nos llevará a Pamplona y después la despedida.

Yo quería volver por Logroño intentando pillar la mínima autopista posible, pero también queria despedirme de mi compañero, así que le seguí hasta una gasolinera en Pamplona y alli entre olor a combustible y ruido de coches nos despedimos, y me quede triste y sin muchas ganas de fiesta motera y pille la autopista hasta Miranda y allí pague el peaje y llegue hasta Burgos, estaba cansado, en lugar de tirar hasta el pueblo pare en casa a comer algo y a quitarme la morriña.

Por la tarde y en coche me fui al pueblo.

Km 8: Alpes. Agosto. Soldeu-Sallent de Gallego: 573km



Hemos desayunado bien, dormido mejor y el día es bueno ... ¡¡pues vamos de compras!!. la cosa es que yo quería mirar un pinlock para el caso y un traje de agua que no mojase, así que decidimos parar en alguna tienda de motos para ver lo que tienen. Lo primero encontrarlas, lo segundo esperar a que abran ... joder si es que madrugamos demasiado.

Miramos en un par de ellas, y el pinlock no lo tienen, el traje de agua si así que a la maleta, mi compi se pilla unos guantes y ojea un casco para la próxima.

Después del atasco de la frontera cogemos el eje pirenaico, la idea es entrar en el valle de Aran por la Bonaigüa y desde allí seguir por Francia. Por Sort, Llavorsí y el resto de la valle el día es precioso, pero según ascendemos la Bonaigüa vamos entrando en la nube y en el valle de Aran el tiempo es malo, niebla, lluvia fina ... lo malo es que tiene toda la pinta que no va a mejorar, así que en Vihella decidimos ir por España a ver como esta la cosa ... y esta bien. De nuevo con sol disfrutamos de la carretera hasta Castejón de Sos donde paramos a comer.

Seguimos sin tener claro que hacer, por un lado repetir el Tourmalet, el Obisque, el Aspin nos apetece mucho, pero no queremos hacerlo metidos en la niebla. Decidimos cruzar el túnel de Biescas y una vez allí decidir. Según nos acercamos al túnel las nubes se descuelgan desde la vertiente francesa, lo que no augura nada bueno.


Una vez en el lado francés las cosa empeora, yo voto por dar media vuelta, mi compañero por seguir, y como no vamos a discutir por una cosa de esas, seguimos por el norte a ver que pasa.

Llegamos medio entre nubes y nieblas a Saint Lary Soulan y yo temo que nos metamos en la niebla al subir el primero de los puertos el Aspin, pero me equivoco la subida es una gozada, bajamos y enfilamos el Tourmalet, también sol y buen tiempo, aunque las nubes entran y salen lo único que consiguen es hacer más bello el paisaje.


Después de disfrutar de la cima y echar de menos a nuestro colega Eltron, comenzamos el descenso, yo me noto raro, entre el sol que entra de cara y la visera que la tengo algo sucia no veo bien, decido que cuando vea un fuente paro a pasar un paño y limpiarla. En algún lugar de la carretera que une Luz-St-Sauveour y Argelès-Garzost me toco lo ojos y .... Arrgggg!!! me he olvidado las gafas en la cima de puerto ¡mierda!, paro y se lo digo a Belda, recuerdo perfectamente que me las quite y las deje encima del asiento para ponerme el casco, pero en lugar de volvermelas a poner me fui, mientras me ajustaba el casco, a la cuneta a hacer un pis ... y salí con las gafas en el asiento.

Decidimos que yo vuelvo (son unos 30km) y el sigue para Sallent, buscara alojamiento y yo ya llegare.

Así que salgo raudo y veloz, y disfruto del puerto mucho más de lo que lo he hecho nunca, no hay tráfico, voy rápido volando sobre las curvas, las paellas me divierten, sera por los miles de ellas que hicimos en Suiza, llego a la cima poco después de las ocho .... y no están las gafas, el bar esta cerrado y aunque hay luz y llamo para preguntar nadie me contesta, hace viento y mis gafas sin montura pueden haber volado muy lejos. Decido no perder más el tiempo y empezar el descenso ... lo sigo disfrutando, si en la subida no había nadie en la bajada la sensación es de absoluta soledad.

En Argelès-Garzost pongo gasolina y avanzo rumbo al Sulor y al Oubisque, se que se me hará de noche mucho antes de llegar a Sallent, pero me gustaría haber pasado esos dos puertos con luz, los subo rápido, solo, viendo como el sol baja poco a poco para ocultarse en el horizonte, el Soulor lo hago de día, el tramo entre el Soulor y el Oubisque es mágico, la luz de atardecer y las nubes bajas lo hacen misterioso y bello muy bello, bajo la velocidad y disfruto de las vistas, se me va a hacer de noche igual y estar allí arriba acompañado solo por alguna vaca es increíble y hay que disfrutarlo.

Llegando al Soulor al atardecer

Llegando al Oubisque al atardecer

En la cima no hay nadie, solo en viento y la noche, durante la bajada la niebla me envuelve y yo bajo con mucho cuidado, no quiero encontrarme con algún animal en la carretera, fijo que por aquí no tengo cobertura. Cuando paso por la estación de esquí de Gourette suena un mensaje en el móvil: Tenemos habitación en el hostal de la ultima vez. Respondo diciendo donde estoy y sigo camino.

La subida al Portalet la hago también con cuidado, la niebla sigue entrando y saliendo, el ambiente sigue siendo mágico, no hay nadie, desde que empece a subir el col du Soulor no me he encontrado con nadie, nunca había tenido esa sensación de soledad en la moto, además estoy bien, el cansancio no me esta afectando, la noche es buena, me gustaría seguir conduciendo toda la noche, me encuentro bien, muy bien.

En la cima hace fresco, pero se que me queda nada, así que no me abrigo me lanzo para abajo buscado el final, una cerveza y compañía, llego a Sallent sobre las 11, en ese momento están sacando unos calamares y alguna otra ración más, Belda ha calculado bien, muy bien y ha pedido la cena.

Cenamos, charlamos, tomamos unas cervezas y nos vamos a dormir, han sido muchas horas y mañana sera otro día.

Ahhh!!! Si pasas por el Tourmalet pregunta en el bar si tiene unas gafas olvidadas desde agosto, son gafas sin montura con las patillas azulitas ... si las encuentras dimelo.

Estamos en mitad del Pirineo, he llegado a tiempo para cena, el tiempo es bueno y aún nos queda un día de vacaciones. Las motos duerme a cubierto justo debajo de nosotros. ¿Se puede pedir algo más?

Km 7: Alpes. Agosto. Avignon-Soldeu: 397km



Como no puede ser de otra forma el día amanece feo, miramos las previsiones de internet y el la televisión y nos confirman lo que ya intuíamos: hoy nos mojamos. Pero por ahora no llueve y hacer un día más en Avignon tampoco nos va a solucionar nada, dan mal tiempo para varios días.

Así que después de desayunar un poco nos vestimos de romano, nos despedimos de Ramata y salimos rumbo a Carcassonne. Lo cierto es que no tenemos muy claro lo que queremos hacer, Carcassonne es nuestra primera meta, yo la conozco y en un día sin muchas metas es un sitio bonito de ver, aunque a ninguno nos gusten mucho las grandes aglomeraciones. Después tiraremos hacia al sur, hacia al pirineo, nuestra intención es hacer una transpirenaica, pero no sabemos si la haremos por Francia o por España, incluso si la haremos porque tampoco tenemos muchas ganas de mojarnos, bueno mojarnos nos da igual, lo que no nos apetece es meternos por esos puertos con agua y niebla por el peligro que tiene.

Tras una rápida despedida nos ponemos en marcha, hasta Carcassonne iremos por autopista, después ya veremos. Llegamos a Carcassones y por suerte encontramos sitio para dejar las motos, cosa complicada porque esta hasta arriba de gente. Damos un rápido paseo y compramos algo de pan para la comida, que ya puestos haremos allí sentados en un banco del un parque.



Después ponemos rumbo sur por carreteras nacionales a buscar la "Route de les Cols", a ver si somos capaces de encontrar las indicaciones ... y no, no lo somos. Pero en el Pirineo lo que no faltan son puertos, y ya puestos cambiamos a rumbo oeste para hacer el primer puerto del día en col de la Chioula, al que llegamos con una suave lluvia y con algo de niebla.


En la misma cima decidimos nuestro siguiente paso, a mi compañero le apetece entrar en Andorra, así que vamos a buscar el col de Puymorens y soportando un inmenso atasco (por suerte con las motos podemos ir sorteando los coches) entramos en Andorra por Pas de la Casa y nos dirigimos a el puerto de Envalira.

Nuestra idea era atravesar Andorra, si eso parando en Andorra la Vella a dar una vuelta y dormir ya en España, son las cuatro de la tarde y aún queda mucho día por delante. Pero cuando atravesamos Canillo recuerdo que hace unos años el representante de un Hotel de Soldeu se paso por mi club de montaña para contarnos las maravillosa ofertas de verano (lo cierto es que eran muy buenas), así que paro la moto y le comento la jugada a mi compañero, estamos de acuerdo en dar marcha atrás y preguntar que es gratis.

Y bingo!, las ofertas siguen existiendo y por 68€ tenemos una doble con media pensión, derecho a Jacuzzi. Ni nos lo pensamos.

Estamos en el país de los Pirineos, nos hemos ablandado con las burbujas de un jacuzzi, las cervezas son baratas y hemos esquivado la lluvia. ¿Se puede pedir algo más?

Km 6: Alpes. Agosto. Chamonix-Avignon: 463km






Amanece nublado, aunque no llueve. Desayunamos fuerte y nos preparamos para la ruta, la primera parada es en el mismo Chamonix para hacernos unas fotos con el Mont Blanc al fondo del que se intuye la cima.

Glaciar de Bossons y Mont Blanc
Como la ruta de hoy no tiene desperdicio y para que no se olvide pongo un enlace a Googlemaps:

La primera parte hasta Grenoble: http://g.co/maps/69zfu (Chamonix-Grenoble), cojemos la autopista desde Albertville.

La segunda parte desde Grenoble hasta Avignon: http://g.co/maps/v2d54 (De Grenoble a Avignon), Pasando por las gargantas del Vercors, el col de Rousset y el Mont Ventoux.

Es una ruta alucinate, no tiene grandes puertos, quitando el Mont Ventoux, pero los paisajes son fantasticos, las carreteras estrechas y muchas de ellas sin apenas tráfico. Vamos muy, pero que muy recomendable. Agradecer desde aqui al Forero Stelvio de www.bmwmotos.com su paciencia para indicarnos cada paso de la ruta, cada carretera, cada cruce, sin él nunca hubiesemos descubierto esos paisajes ni esas sensaciones.

Vercors

Col de Remuzat
Parada a comer

Mont Ventoux

El día es prefecto, sol y buena temperatura, vamos siguiendo la ruta indicada sin demasiadas complicaciones, para cruzar Grenoble seguimos las indicaciones de GPS sin ningún tipo de problema, he descubierto que mi Garmin en España tiene muchos más problemas que en Francia o Suiza.

Paramos a comer en unas piscinas naturales, nos cobran entrada, pero estamos cansados y el precio no es caro, descansamos después de comer unos bocatas nos ganas dan de meternos en el agua, pero no queremos llevar ropa mojada en las maletas y lo dejamos para otra ocasión.

Por la tarde atacamos en Mont Ventoux, es alucinante, no es ni el más bonito, ni el más alto ni el más nada de los puertos que llevamos hechos, pero tiene algo especial, esta allí solo, el paisaje de bosque de coníferas que te acompaña en la parte baja da paso a un terreno yermo de arena y piedras finas, parece que has llegado a otro mundo, el viento sopla con fuerza en los últimos kilómetros, estar en la cima es insoportable, así que hacemos un par de fotos y para abajo por la otra vertiente. Nos cruzamos con multitud de escoters que suben a su ritmo, también alguna que otra moto clásica, suponemos que habrá algún tipo de concentración o algo, pero nosotros seguimos hacia abajo, cuando entramos de nuevo en el bosque disfrutamos de cada curva, de cada kilómetro, son los últimos en los Alpes a partir de aquí siento que se van acabando las vacaciones y empieza el regreso.

Enfilamos rumbo a Avignon, alli hemos quedado con Ramata que nos dará alojamiento y nos servirá de guía en su ciudad, el clima va cambiando las nubes en la lejania nos hacen pensar que hoy nos vamos a mojar.

Rumbo a Avignon
Por suerte esta vez libramos y llegamos secos a nuestro destino, sin mayores problemas encontramos la casa de nuestra anfitriona, descargamos, nos damos una ducha y salimos a conocer la cuidad, después cenaremos en una bonita plaza, tomaremos una cerveza y a dormir. Por la noche nos despierta una enorme tromba de agua, un rayo deja por unos instantes sin luz a la ciudad, las calles se han convertido en rios, nos empezamos a plantear si mañana podremos seguir camino; pero son las tres o las cuatro de la mañana, así que mejor seguir durmiendo, cuando amanezca ya decidiremos.





Hemos encontrado carreteras escondidas, atravesado gargantas de roca que llegaban hasta el cielo, luchado contra el viento en el monte de los vientos y escuchado la tormenta desde la seguridad y el calor de una casa amiga, las motos están aparcadas debajo de la ventana, esperando. ¿Se puede pedir algo más?.

Km 5: Alpes. Agosto. Interlaken-Chamonix: 436km




Amanece con buen tiempo, tomamos un café con Sybille, hoy parece que si toca desayunar aunque sea un café solo bebido; nos vestimos como cada día de romanos y nos despedimos de nuestra anfitriona. Es bonito descubrir que en el mundo la mayoría de la gente es buena y esta dispuesta a ayudarte a cambio de una sonrisa o de una rato de conversación distendida. Gracias amiga.

Después de la rutina diaria de meter las bolsas en las maletas,decirle a GPS a donde queremos ir, ponemos rumbo a Berna por la autopista.

La idea para hoy era conocer Berna y Lucerna, pasar por Liechtenstein y así conocer unos de los países más pequeños de Europa y dormir en algún sitio próximo al Stelvio que queríamos subir al día siguiente.

El camino a Berna es ... autopista, que más se puede decir, aunque por suerte en Suiza de vez en cuando las vistas desde la autopista son preciosas, no dejan de ser aburridas.

Entramos en Berna dejandonos guiar a medias por el GPS y la otra mitad por las indicaciones de "Zentrum" aparcamos en frente de la embajada de EEUU, seguro que no hay sitio más seguro en toda la ciudad para dejar las motos.

Berna es bonita, y aunque las calles del centro están de obras disfrutamos de la visita.




Como nuestro desayuno ha sido bastante frugal entramos en un supermercado a comprar una tableta de chocolate, estamos en Suiza!, una bebida de té y algo de pan para la comida. El chocolate dura un rato, hasta que llegamos a un parque.

Después de esa rápida visita enfilamos las motos rumbo a Lucerna, también por autopista, pero esta vez es la autopista la que esta de obras y además con mucho tráfico.

Poco antes de Lucerna paramos en un área de servicio con vistas al lago Sempachersse donde damos cuanta de unos bocatas que serán nuestra comida.

Aquí empieza a chispear, lo cierto es que desde que salimos de Berna vemos nubes negras en el horizonte y las informaciones meteorológicas dan agua por la zona, por la zona de Stelvio también dan agua para los próximos días, y por lo que vemos parece que no se han equivocado. Aunque estemos a casi 300 km de nuestro destino creemos que es el momento de tomar una decisión.

Y la decisión es sencilla, solo hay dos opciones: una arriesgar, tirar para la zona de Stelvio y ver como evoluciona el tiempo, si se puede hacerlo y empezar a volver por donde haga algo mejor. La segunda, darnos la vuelta, si el tiempo lo permite acercarnos a la zona de Grenoble y sus puertos míticos o ir viendo sobre la marcha.

Y decidimos rápido: media vuelta. A los dos nos jode, sabemos pueden pasar muchos años hasta que volvamos a estar aquí, pero las previsiones son más que malas y lo más probable es que nos mojemos hoy para tener que darnos la vuelta mañana también bajo la lluvia.

Así que seguimos rumbo a Lucerna, el que nos vayamos a dar la vuelta no significa hacerlo ya.

Como somos gente que siempre busca la seguridad, aparcamos al lado de una comisaría de policia justo en el centro; y nos aprestamos a dar una vuelta.




Lucerna tiene un centro precioso, lo más significativos son dos puente medievales, aunque los edificios y calles aledañas también son dignos de visita.





Después de un tranquilo paseo y con el cielo cada vez más negro hacia el este, cosa que nos reafirma en nuestra decisión o al menos hace que no le demos muchas vueltas en la cabeza, subimos a las motos para deshacer el camino hecho, nuevo rumbo: Chamonix.

¿Porque Chamonix?, pues por un lado porque llevamos unos 170 km y hasta allí solo hay unos 290, lo que nos da un total de unos 450 km, mayoritariamente por autopista, distancia más que asequible. Ir hasta la zona de Grenoble es mucho, son las tres de la tarde más o menos y no tenemos tiempo material de llegar a buena hora.

Por otro porque nos quedamos sin verlo el día que salimos de Séez por la lluvia, y no es bueno dejar las cosas a medias.

Y por ultimo, porque a mi me apetece, he estado dos veces en Chamonix para hacer montaña y se que las vistas del macizo de Mont-Blanc desde allí son impresionantes, me apetece volver a verlas y que mi compañero las conozca. Además que narices es mi cumpleaños y celebrarlo en Chamonix me va atraer gratos recuerdos, sería mi segundo cumpleaños allí y el primero fue muy especial.

Así que salimos de nuevo a la autopista de dejamos que vayan pasando los kilómetros. El tiempo es regular y nos caen cuatro gotas un par de veces, pero parece que la autopista va esquivando las tormentas. ¿Cuanto aguantaremos sin mojarnos?

Llegamos a Martigni y por fin dejamos la autopista para coger el puerto de la Forclaz, impresionante en sus primeros km, y entramos en Francia. la carretera es mala y a ratos esta mojada, hay mucho tráfico y el cielo esta más que cubierto. Hoy no vamos a ver nada, una pena.

La llegada a Chamonix es como meterte en Benidorm en agosto, una locura. Después de una vuelta rápida para ver que aparcar en el centro o cerca va a ser imposible decido ya se donde aparcar ... al cementerio, y allí debajo de un árbol dejamos las motos, vale hay un parking a la entrada, no metemos las motos entre las tumbas.

Ahora toca buscar alojamiento, y la cosa es complicada, en todos los hoteles nos piden sobre los 90€ por una habitación doble, y eso no estamos dispuestos a pagarlo, sabemos que si seguimos unos km y nos alejamos de tan turístico lugar encontraremos sitios por bastante menos. Pero ya que estamos miraremos un par de sitios más y de paso daremos una vueltecita por el pueblo.

Y lo encontramos, en una calle que sale de la calle principal hay un bed&breakfast en el que nos dan cama y desayunos por algo menos de 60€, eso esta mejor.

Salimos a buscar las motos, no se muy bien como negocio Koldo la cosa, pero tenemos 10  o 15 minutos para llegar con las motos y los bultos o nos quedamos sin habitación ... ni idea de porque no nos la cobro y punto. Y claro, no todo iba a ser fácil, llegar al cementerio no tiene problemas, pero si empieza a caer el diluvio universal la cosa se complica, y el diluvio cayó.

Nos refugiamos en los soportales y debajo de los toldos de las tiendas, solo salimos cuando "cae menos", pero aún así y vestidos de moteros llegamos chorreando a las motos, y empapados a nuestro alojamiento. Aunque por suerte a llegar deja de llover.

Mirando al Mont Blanc desde Chamonix

Y toca buscar aparcamiento, justo detrás esta el parking de un supermercado y fijo que algún hueco encontramos, según entro veo una moto aparcada y el sitio justo para meter la mía, justo cuando empiezo a maniobrar llega el dueño y me dice que en un segundo la saca y así entro mejor, es español y cuando aparco nos ponemos a hablar, resulta ser un forero del bmwmotos.com y además al que te acaban llevando tarde o temprano la mayoría de las rutas por los alpes que por allí pululan, es Stelvio un magnifico conocedor de la zona, aparte de una buena persona.

Así que empezamos a charlas de las rutas que hemos hecho los días anteriores y lo poco claro que tenemos para los los siguientes, porque la meteo no esta para muchas alegrías, y nos fabrica una ruta sobre la marcha, yo apunto en un papel las indicaciones que me parecen más importantes, rezando para ser capaz de organizar todo aquello en la habitación antes de que mi memoria de pez lo olvide.

Después de un rato de charla bajo un suave lluvia nos despedimos, cosas como esa me reafirman en la idea de que la mayoría de la gente es buena y dispuesta a ayudarte, solo que los malos salen más en las noticias.

Una ducha y a buscar donde cenar, es mi cumple y hay que celebrarlo, una fonfue y unas cervezas serán nuestra cena, otra cerveza nos acompañara en el salón de bed&breakfast mientras pasamos a limpio la ruta recomendada por el amigo Stelvio.

Estamos en la capital mundial del alpinismo y las motos bajo la ventana, tenemos una ruta para el día siguiente por una zona con baja posibilidad de lluvias y soy un año más viejo.


¿Se puede pedir algo más?

13 de septiembre de 2011

Km 4: Alpes. Agosto. Interlaken-Interlaken: 383km




El día amanece ... bonito, desde nuestra ventana se ve la Jungfrau y se la ve despejada ... así que rock&roll, ¡¡¡hay que aprovechar!!! y eso significa salir ya. Como siempre salimos sin desayunar.

Lo primero es poner gasolina, y por primera vez usamos las gasolineras autoservicio suizas, la primera vez impresiona, pero es tan sencillo como meter la tarjerta, el pin, elegir el surtidor y en algunos casos el tipo de combustible y rellenar, se supone que cuando terminas te carga el importe y listo.

Lo segundo, yo quiero, necesito, ir a Grindelwald, no porque ese pueblo tenga nada de especial, sino porque esta en la base de la cara norte de Eiger y eso es algo que un amante de la montaña no puede dejar de ver. A modo de resumen decir que el los Alpes existían "los tres últimos problemas", tres caras norte de tres montañas imposibles, difíciles, peligrosas e inmensas. Eran dos cuatromiles: El cervino y las Grandes Jorasses (en el macizo de Mont Blanc) y un tresmil ... el Eiger (El Ogro) en Grindelwald; las historias de los primeros intentos y las primeras ascensiones a este ultimo están llenas de muertes, de rescates imposibles, de heroísmo y compañerismo a partes iguales. Y esa montaña tenia que verla, así que rumbo a Grindelwald, y la montaña se deja ver y disfruto de la vista, jo que bonita es, como impresiona.

Cara Norte del Eiger


Yo se que el Eiger el Monch y la Jungfrau formas uno de los skylines más bonitos de los Alpes,
Eiger, Monch y Jungfrau

lo que no se es desde donde se ve, pero como desde Grindelwald no es, así vamos a ver si desde Mürren hay suerte y no la hay, pero las vistas también son preciosas.



Después de ver montañas, nos vamos a hacer puertos, lo primero, autopista hacia el este para después iniciar las subida al primer puerto del día el Sustenpass, en su cima desayunamos-comemos un poco de embutido, la bajada nos deja listos para hacer el Furkapass, precioso, grande, perfecto astalfo, sol y unas vistas impresionantes.

Subida del Sustempass

Cima del Sustempass
Y la bajada

El Grimselpass bajando el Furkapass


Cuando lo bajas ves frente a ti el Grimselpass que habíamos subido bajo la lluvia el día anterior, se le ve magnifico, apetecible, pero Koldo se me ha escapado en dirección al Nufenenpass y no tengo forma de contactar, después supe que él habia pensado lo mismo, mira que me lo estaba imaginando, pero era una locura subir un puerto ási sin decirlo, es preocupar y mucho al otro, así que bajo el sol pongo rumbo a siguiente puerto del día; el Nufenenpass, también precioso. ¿Hay algo que no sea precioso por aquí?.

Vistas desde el Nufenenpass


En la cima nos volvemos a juntar, comentamos entre risas nuestors pensamientos sobre el Grimsel y salimos en busca del ultimo puerto "grande" del día, el St. Gotthardpass. Los dos habíamos oído hablar de la "Via Tremola" subida adoquinada, llena de pellas, estrecha y genial de ese puerto, también habíamos decidido que si no había agua en la carretera intentaríamos hacerla ... pero una cosa es lo que nosotros pobres humanos pensemos y otra lo que los carteles de las carreteras te dicen, y lo que nos dijeron es que nos suben por la autopista ... hasta que la salida de un túnel vimos esto:

Via Tremola del San Gotardo


Y claro eso no esta allí para nada, así que buscamos la entrada y la encontramos, la bajamos, pero como la idea era subirla ... pues también la subimos y para bajar ... pues seguimos por la via Tremola por el otro lado que a algún lugar llevará ... y nos llevo de nuevo a la carretera. Y mira que nos gusto ese puerto.


Vía Tremola del San Gotardo


La idea era ir a Berna que Sybille nos había dicho que tenia un centro histórico chulo, pero cuando paramos a comer a orillas de un lago Koldo tenia un sms de Sybille diciendo que uno de nosotros se había olvidado las deportivas ... y ese era yo. La cosa es que no tenia más calzado que las botas de moto y esas zapatillas, y no era cosa de estar todo el tipo con las botas de moto puestas, y comprar unas deportivas a precios suizo como que no, y además esa noche no teníamos sitio fijo donde dormir ... iba a ser cerca de Berna, y Interlaken esta a 70km y nos pilla de camino (la ruta hacia Berna nos pasaba si o si por allí), así que respondemos que en hora y media estamos allí y terminamos de comer nuestro bocata tranquilamente.

Parada a comer cerca de Bouchs

Llegamos a Interlaken y esperamos a que Sybille aterrice, y nos debe ver cansados, o le habíamos caído bien el día anterior o un poco de cada así nos ofrece dormir esa noche también en su casa, aceptamos, recogemos las llaves, aparcamos igual de bien que el día anterior, nos duchamos y nos damos un paseo por Interlaken, que tiene más bien poco que ver.

Cuando llega Sybille nos dice que va a ir con unos amigos de barbacoa al lago, que si nos animamos, que ella ya ha comprado la carne. Aceptamos. Al poco llega Mónica una amiga suya y salimos hacia el lago. Buscamos leña, esperamos a que quede una barbacoa libre y empezamos a asar. De cena hay Salchichas de varios tipos, ensalada, vino, té, han comprado carne pensado en nosotros, pero nosotros tenemos nuestro as en la manga ... bueno en el topcase, jamón ibérico, chorizo de León , lomo y si hace falta alguna cosa más.



Al final nos juntamos ocho o diez, han traído cervezas y una guitarra. Pasamos un rato divertido hasta que a las doce de la noche decidimos que ya va siendo hora. Nos vamos a dormir.

Hemos hecho un montón de puertos, nos hemos llenado los ojos de paisajes increíbles, hemos cenado de barbacoa a la orilla de un lago maravilloso con una gente la mar de agradable, seguimos siendo dos amigos en medio de los Alpes con las motos aparcadas cerca. Esperándonos.

¿Se puede pedir algo más?